El Comité de Competición ha aplicado la sanción en su grado máximo referente a la inhabilitación, que podía oscilar entre un mes y un año, por hechos que cataloga como muy graves, atendiendo al artículo 38, en su apartado G, que dice que “incurrirán en responsabilidad por falta muy grave quienes resultasen autores de las siguientes infracciones: g) Actos notorios y públicos que afecten a la dignidad o decoro deportivos, cuando revistan una especial gravedad, o reincidencia en infracciones graves de esta naturaleza”. Para ello, aplica la sanción contenida en el artículo 59: “El órgano disciplinario competente, según lo dispuesto en las Normas de Disciplina Deportiva, podrá imponer multa en cuantía de 60 a 120 euros, inhabilitación por tiempo de un mes a un año o suspensión de cuatro o más encuentros en una misma temporada, o clausura de hasta dos partidos de las instalaciones, por la comisión de las siguientes infracciones: b) Actos notorios y públicos que atenten a la dignidad o decoro deportivos”.
El presidente del Mendi, que niega ser el autor de las frases, puede recurrir la sanción ante el Comité de Apelación. Santiago Hermoso de Mendoza fue identificado en el acta por proferir comentarios machistas hacia la árbitra asistente, Amaya Rodríguez, lo que propició que el partido Avance-Mendi, correspondiente a la cuarta jornada, estuviera detenido durante 81 minutos.
El árbitro, Felipe Martínez, hizo constar en acta los motivos de la interrupción, así como la identificación de la persona que había realizado los comentarios. Al día siguiente, la árbitra asistente interpuso denuncia ante la Policía Foral por injurias. Más allá del camino de esa denuncia, el Comité de Competición castigó los hechos que recogió el acta, dando crédito a la versión del trío arbitral, a pesar de que el presidente del Mendi negaba haber realizado dichos comentarios. En el acta, el árbitro registró también que, más allá del incidente, la actitud de jugadores y resto de directivos del Mendi habían sido correctos, por lo que el club no ha recibido sanción. El partido terminó con el resultado de 4-3.
El árbitro lo deja por ahora
El árbitro del partido, Felipe Martínez Quiroga, ha solicitado un permiso temporal debido a un cúmulo de circunstancias que se han acelerado a raíz de este hecho desagradable. Tras el incidente le ha hecho reflexionar hacia dónde camina el fútbol regional y por ahora prefiere dejar el arbitraje y dedicar el tiempo a su familia. El colegiado, que acababa de descender de Tercera División, llevaba nueve años en el arbitraje.
Fuente: noticiasdenavarra.com
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