lunes, 29 de mayo de 2017

HACIA LA PRIMERA DIVISIÓN FEMENINA

AINARA ACEVEDO, INMACULADA PRIETO, MARTA HUERTA Y ZULEMA GONZÁLEZ, CUATRO EJEMPLOS DE LA CLARA PROYECCIÓN DE LA MUJER EN EL CAMPO DEL ARBITRAJE.

El arbitraje femenino español quiere dar un paso de gigante para que sus colegiadas se conviertan en las mejores de Europa, si es que no lo son ya. Con María Luisa Villa al frente del Comité Femenino, el arbitraje de las chicas está subiendo peldaños muy importantes para lograr los objetivos que se marcaron en su día. Por ello, el próximo mes de junio 50 árbitras española acudirán a Madrid para realizar pruebas físicas y técnicas con el fin de que las mejores puedan arbitrar la Primera división del fútbol femenino, algo por lo que llevan luchando muchos años. En otros países, tanto el fútbol femenino como el arbitraje tiene mucha más relevancia que en España y lo quieren nuestras chicas es igualarse a estos países, sobre todo los nórdicos. Para ello saben que han de trabajar y esforzarse al máximo para ver cumplidos sus sueños.
El arbitraje femenino se encuentra en un momento histórico y la lucha y el trabajo que se está realizando verá, en breve, como sus frutos salen a flote y las árbitras podrán dirigir encuentros de la Primera División femenina. Eso será, a partir de la temporada que viene. Tanto el fútbol como el arbitraje femenino están de enhorabuena. Aunque todas las que acudan a dicha reunión tienen serias posibilidades de ser elegidas, hemos querido hablar con cuatro de ellas para que nos digan como se sienten ante esta buena nueva. Son Ainara Acevedo (colegio catalán), Inmaculada Prieto (colegio andaluz), Zulema González (colegio gallego) y Marta Huerta (colegio tinerfeño). Las cuatro están que no caben en sí dado que van a ver cumplido su sueño de dirigir en la máxima categoría femenina.


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AINARA ACEVEDO entró en el mundo del arbitraje por casualidad. No tiene ningún familiar que hubiera tenido contacto con este mundo y se hizo árbitro “al ver un cartel en el que se pedían chicas para ser árbitros. Fue en la universidad. Estaba clavado en un corcho, llamé y hasta ahora. Cuando llegué a casa y lo dije alucinaron. De esto hace 5 temporadas, cuando tenía 19 años”. Ainara, que arbitra en la Primera Preferente catalana, tiene muy claro que el paso que se quiere dar “es increíble y muy bueno para el arbitraje femenino. Para todas nosotras ha sido una sorpresa muy grande que se esté luchando por conseguir esto. Seguro que esta lucha dará más ganas a todas las chicas para que se dediquen al arbitraje”. Y es que el arbitraje femenino en otros países
está en la cima. “Es cierto que en otros países tanto el arbitraje como el fútbol femenino está muy por encima de  España. Debemos intentar ponernos a su altura y con esta medida que se va a tomar, a buen seguro que lo vamos a conseguir”. Ainara tiene muy claro que ella se siente valorada. “El hecho de ser mujer y ser árbitro no me ha causado ningún problema. En mi caso, tanto en el Comité Catalán y en los partidos, me siento muy valorada y no he tenido ningún problema. Quizá en las pruebas físicas tenemos algo más de problemas porque nos piden lo mismo que a un chico y hay que entrenar mucho par poder conseguirlo. No es una queja ya que entiendo que el fútbol es cada vez más rápido y hay que estar en plena forma”.

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INMACULADA PRIETO, del Comité Andaluz, vivió el arbitraje desde pequeña ya que su padre era asistente de Segunda división A: “Siempre me fijaba en la figura del árbitro e, incluso, en el colegio, en vez de jugar  arbitraba los partidos. El arbitraje tiene unos valores que siempre me han influenciado: igualdad, repartir justicia, autoridad. Mi padre siempre me enseño a respetar todo esto y el arbitraje lo tiene”. Inmaculada entiende que el que las árbitras dirijan en Primera División femenina “es un logro muy importante. Hace tiempo que lo deberíamos haber hecho, pero nunca es tarde. Marisa y su equipo están haciendo una labor increíble en el arbitraje femenino y ahora van a dar este paso que para todas nosotras en algo que llevábamos buscando hace tiempo”. Prieto, al igual que su compañera Ainara está de acuerdo en que “España está un poco a la retaguardia respecto a otros países en el mundo del arbitraje y del fútbol femenino. Siento admiración por estos países que dan esta importancia al arbitraje femenino”. La andaluza, que es asistente en Tercera División masculina, se siente “valorada porque la sociedad ahora es más normal, aunque todavía hay personas que siguen insultando. A mí no me ha pasado nada, pero ya sabemos que el
árbitro siempre tiene la culpa tanto en los chicos como en las chicas y eso es algo que siempre está ahí, aunque evidentemente nosotras y ellos siempre pitamos lo que vemos y por ello tenemos la conciencia muy tranquila de las decisiones que tomamos”.

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MARTA HUERTA, colegio tinerfeño, es internacional desde el 2016 y está encantada del paso que se va a dar en el arbitraje femenino español. “Es un sueño, ya que siempre hemos deseado tener esta oportunidad porque el arbitraje femenino merece estar entre los mejores del mundo”. Marta comenzó en el arbitraje “hace 12 temporadas porque siempre he estado vinculada al deporte y al fútbol en particular. Cuando entras en el mundo del arbitraje ya no puedes salir. Es algo que te engancha tanto que es una de las mejores decisiones que se pueden tomar y, claro está, no me arrepiento para nada de ello”. Para Marta, el hecho de poder arbitrar en Primera división femenina “es algo que dará la oportunidad a muchas de cumplir un sueño. Algunas se quedaban en el camino y ahora, con esta medida, habrá muchas más oportunidades para que todas podamos evolucionar y conseguir así las metas que con mucho sacrificio cuestan conseguir”. La internacional, al igual que sus compañeras se siente “muy valorada desde el primer día. Pienso, incluso, que por ser mujer nos favorecen mucho mas y estamos más respaldadas por ser minoría. Aunque no lo teníamos fácil, ahora, con Marisa a la cabeza, podemos hacer grandes cosas e igualarnos a los chicos”. Lo que sí tiene claro Marta es que “habrá que trabajar muy duro para poder conseguir una plaza que te de la opción de arbitrar en Primera División porque en España hay árbitras muy buenas y no va a ser nada fácil poder conseguirlo”.
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ZULEMA GONZÁLEZ, es gallega y al igual que Inmaculada Prieto, ha visto el arbitraje desde pequeña, “Con mi tío Bernardino González Vázquez, árbitro de Primera e internacional, y mi otro tío Manolo, que fue asistente de Segunda división A, enseguida me decidí por ser árbitro. Fue lo que viví en casa y evidentemente me influenció en mi decisión. Eso sí, tengo muy claro que no me arrepiento para nada de haber elegido ser árbitro de fútbol”. Arbitra en Tercera división masculina y en Segunda femenina. “En toda España el trío arbitral está compuesto por mujeres y eso hace que nos sintamos valoradas en lo que hacemos”. Zulema sabe que llegar a arbitrar en Primera división femenina es algo “muy importante. Va a ser muy duro poder estar entre las elegidas, pero hay que pelear porque es una gran oportunidad de seguir ascendiendo y evolucionando en un mundo que es apasionante”. A buen seguro que sus tíos ex árbitros le habrán dado consejos: “Claro que me han dado consejos y me han apoyado mucho. Me dicen que lo disfrute, que trabaje mucho porque con trabajo se pueden conseguir muchas cosas. Yo, evidentemente, quiero seguir sus pasos y pos eso les hago todo el caso del mundo”. La gallega lleva 13 años en el arbitraje y afirma “que una de las causas que me llevó a ser árbitro es porque quise vivir el deporte como futbolista, pero al no haber equipo femenino en mi ciudad vi la ocasión de ser árbitro.

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Fuente: Revista RFEF

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